Prohibir la clonación de animales con la finalidad de obtener alimentos para el consumo humano, es algo que están promoviendo un grupo de eurodiputados, como sabemos, a estos alimentos se les dio luz verde en Estados Unidos y recientemente en la Unión Europea, de ello hablábamos en el post Los alimentos obtenidos a partir de animales clonados, cuestionados.
Los eurodiputados van a presentar un proyecto de resolución al Parlamento Europeo para prohibir la clonación de animales y la comercialización de los productos derivados de animales clonados que provengan de cualquier país del mundo. La base para esta solicitud es el informe que presentó el Grupo Europeo sobre Ética el pasado mes de enero, en él se mostraban algunas dudas morales por el sufrimiento de los animales al ser sometidos a esta práctica. Nosotros añadiríamos algunos argumentos más.
En primer lugar destacamos que un animal clonado tiene más posibilidades de sufrir diversas enfermedades que un animal original, también cabe destacar que esta situación propicia una tasa de muerte mayor en los animales clonados. Siendo copias idénticas, parece bastante incomprensible que se dé esta situación y puede ser una señal de alarma que nos indica que puede afectar a largo plazo al organismo humano.
No existen estudios a largo plazo, ni nada que asegure que realmente podemos disfrutar de estos alimentos sin temor alguno, sería interesante posponer la aprobación hasta estar completamente seguros de los beneficios.
Volvemos a recordar lo que manifestaba la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) en su informe de hace un mes, no existe ningún riesgo y los alimentos originales y los obtenidos a partir de animales clonados presentan características muy similares… pero no idénticas. Recordemos que mínimas diferencias genéticas nos hacen ser distintos a la mosca del vinagre, con esto queremos decir que algo insignificante puede representar mucho y puede provocar serios y graves problemas. No queremos decir que vetemos la clonación de animales para la alimentación humana, pero sí que son necesarias nuevas investigaciones realizadas por un grupo internacional de científicos para una determinación precisa.
Indudablemente, la moción presentada por los eurodiputados del intergrupo (grupo informal de trabajo formado por eurodiputados de distintos grupos políticos pero con un interés común) por el Bienestar Animal no va a prosperar, por un lado, no existen nuevas pruebas que confirmen algún riesgo para la salud humana, y por otro, representan una minoría que será desoída por la mayoría de los miembros que conforman la UE, puesto que éstos ya dieron en su momento la aprobación.
Como en la mayoría de ocasiones, es fácil deducir que se encuentran de por medio los intereses económicos, algo que parece ser más valorado que la salud del consumidor.